martes, 16 de noviembre de 2021

CRITÓN. Día 31. (Platón, 49a - 49b)

Llegamos a uno de los puntos fuertes del diálogo, cuyo discurso será recordado. Comienza a subir el tono. Y lo hace Sócrates en forma de preguntas y preguntas, que contienen afirmaciones y afirmaciones. Se encadena siempre la pregunta y la afirmación, están en continuidad. Se presenta vivo y elocuente, por tanto, el discurso con el que se puede entrar en diálogo a través del razonamiento. Sin lugar a dudas este modo de presentarse de primeras una afirmación como si fuera una pregunta lo que significa es, profundamente, que ya está con nosotros la afirmación en la posibilidad de preguntar, cuando se hace consciente. 

Muchas preguntas, muchas. De gran calado. 

¿Afirmamos que en ningún caso hay que hacer el mal voluntariamente, o que en unos casos sí y en otros no, o bien que de ningún modo es bueno y honrado hacer el mal, tal como hemos convenido muchas veces anteriormente? Eso es también lo que acabamos de decir.

οὐδενὶ τρόπῳ φαμὲν ἑκόντας ἀδικητέον εἶναι τινὶ μὲν ἀδικητέον τρόπῳ τινὶ δὲ οὔ οὐδαμῶς τό γε ἀδικεῖν οὔτε ἀγαθὸν οὔτε καλόνὡς πολλάκις ἡμῖν καὶ ἐν τῷ ἔμπροσθεν χρόνῳ ὡμολογήθη

Esto parece demostrado, pero se apuntala aquí la argumentación desde el inicio. Se asume como clave para todo lo demás que hacer el mal no queda justificado en ningún caso. Hacer el mal "voluntariamente" (recuerdo aquí esta clave esencial y juego de voluntad y voluntades, es decir, de movimientos personales y personas movidas por algo) queda absolutamente descartado. Se puede hacer lo que sea. Se puede intentar y no llegar. Pero la frontera nítida es que, ante aquello que se presenta como mal, no realizarlo, no darle cabida por tanto en uno mismo. 

Sorprende que aquí está enfatizada la ausencia de otro que pueda recibirlo y se subraye de esta forma la relación con "el mal" en sí mismo y por sí mismo, y de modo "voluntario", "querido", "buscado", lo cual incluye el conocimiento de que es un mal y que sea asumido por la persona como tal. ¡Como mal! 

Lo recuerdo, porque es neurálgico y nuclear. Y tendrá un desarrollo incierto en la historia del pensamiento, es decir, de esta y aquella persona concreta. Del mal, se huye. No se acoge voluntariamente el mal, como mal. Cuando se presenta, no hay que hacerlo, no hay que realizarlo. 

Esto, de algún modo, revela la densidad real del pensamiento socrático frente a las burlas que de él se hacen intelectualizándolo. Aquí es una voluntad y una acción lo que viene estando directamente esgrimido. 

Mucho más se puede decir. Porque se oponen los términos usados casi expresamente. 

Siguiente pregunta. 

¿Acaso todas nuestras ideas comunes de antes se han desvanecido en estos pocos días y, desde hace tiempo, Critón, hombres ya viejos, dialogamos uno con otro, seriamente sin darnos cuenta de que en nada nos distinguimos de los niños? O, más bien, es totalmente como nosotros decíamos entonces, lo afirme o lo niegue la mayoría; y, aunque tengamos que sufrir cosas aún más penosas que las presentes, o bien más agradables, ¿cometer injusticia no es, en todo caso, malo o vergonzoso para el que la comete? ¿Lo afirmamos o no?

ὅπερ καὶ ἄρτι ἐλέγετο  πᾶσαι ἡμῖν ἐκεῖναι αἱ πρόσθεν ὁμολογίαι ἐν ταῖσδε ταῖς ὀλίγαις ἡμέραις ἐκκεχυμέναι εἰσίνκαὶ πάλαι Κρίτωνἄρα τηλικοίδε γέροντες ἄνδρες πρὸς ἀλλήλους σπουδῇ διαλεγόμενοι ἐλάθομεν ἡμᾶς αὐτοὺς παίδων οὐδὲν διαφέροντες παντὸς μᾶλλον οὕτως ἔχει ὥσπερ τότε ἐλέγετο ἡμῖνεἴτε φασὶν οἱ πολλοὶ εἴτε μήκαὶ εἴτε δεῖ ἡμᾶς ἔτι τῶνδε χαλεπώτερα πάσχειν εἴτε καὶ πρᾳότεραὅμως τό γε ἀδικεῖν τῷ ἀδικοῦντι καὶ κακὸν καὶ αἰσχρὸν τυγχάνει ὂν παντὶ τρόπῳφαμὲν  οὔ;

Critón responde, suponemos que en bloque: 

Lo afirmamos. 

φαμέν.

Se llaman "ideas comunes" a los fuertes ideales compartidos por la comunidad. Lo que hoy llamaríamos de otro modo, si es que lo tenemos. Sería esa especie de compromiso fuerte de cada miembro de la comunidad por llevar realmente a lo más alto a la comunidad en su conjunto, elevando sin duda el tono. Lo cual ya marca una distancia seria y consciente entre el punto de partida, es decir, el principio, y lo que venga después con la acción de cada persona miembro de esa comunidad, con un compromiso. No es que la persona se pierda en la comunidad, es que hay un lazo que le une con ella y, a través de ella, con toda la humanidad. Esta expresión elevada son "los ideales comunes", dicho en plural, consciente por tanto de sus diferente caminos. 

Hay más que un "común" un "nosotros" dicho seriamente, que une a todos. Ese "nosotros" es extraordinario. Porque, en realidad, es el punto de llegada, que se hace en el principio punto de partida, sin serlo. Y, por lo tanto, moviendo la voluntad. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario