Hay lecturas que, pese a leerlas repetidamente, una y otra vez tienen algo nuevo. No creo que todo libro dé de sí tanto. Serán unos pocos, muy anclados en lo humano y en la sabiduría que se ha ido acumulando. Algunos de estos textos, curiosamente escritos demasiado rápidos, aunque con un fondo de humanidad mucho más amplio.
El Evangelio es, sin lugar a dudas, uno de estos. Estoy con Marcos y no abandono Lucas. Juan y Mateo me pillan más distantes. ¿Habéis leído Lc 5,1-11? Os invito a ello. Os lo dejo aquí.
[1] La gente se agolpaba junto a él para escuchar la Palabra de Dios, mientras él estaba a la orilla del lago de Genesaret. [2] Vio dos barcas junto a la orilla, los pescadores se habían bajado y estaban lavando sus redes. [3] Subiendo a una de las barcas, la de Simón, le pidió que se apartase un poco de tierra. Se sentó y se puso a enseñar a la multitud desde la barca. [4] Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: —Boga lago adentro y echa las redes para pescar. [5] Le replicó Simón: —Maestro, hemos bregado toda la noche y no hemos sacado nada; pero, ya que lo dices, echaré las redes. [6] Lo hicieron y capturaron tal cantidad de peces que reventaban las redes. [7] Hicieron señas a los socios de la otra barca para que fueran a echarles una mano. Llegaron y llenaron las dos barcas, que casi se hundían. [8] Al verlo, Simón Pedro cayó a los pies de Jesús y dijo: —¡Apártate de mí, Señor, que soy un pecador! [9] Pues el estupor se había apoderado de él y de todos sus compañeros por la cantidad de peces que habían pescado. [10] Lo mismo sucedía a Juan y Santiago, hijos de Zebedeo, que eran socios de Simón. Jesús dijo a Simón: —No temas, en adelante serás pescador de hombres. [11] Entonces, atracando las barcas en tierra, lo dejaron todo y le siguieron.
Solo unos detalles. Rápidos, que voy sin tiempo.
- No se dice que van a escuchar a Jesús, sino directamente la Palabra de Dios. Además, esta palabra no es dicha sin más como una sabiduría o revelación de Dios intelectual, sino que es eficaz. Pedro, con una confianza inaudita, se fía de Jesús y hace lo que dice. Los paralelos son muchos con otros textos en los que ocurre lo mismo.
- Pedro pone problemas, no lo hace sin más. Está pegado a la realidad, es un realista indómito. Sin embargo, por la fe obra algo diferente. Hace lo inesperado y se aventura en lo original.
- Lo que sucede es un signo. El mar, como lugar de muerte para las personas, se transforma en signo. La misión, por la que se añade a su persona ya un nombre nuevo sin más explicación, supera con creces la capacidad humana. Enfrentarse al mal, incluso con la mejor intención, supone un reconocimiento de la limitación, debilidad y contingencia humana. Dos barcas parecen insuficientes. Solo la Presencia de Jesús garantiza el éxito. Siguen adelante.
- Al llegar, humildad y sobrecogimiento. No sueltan las redes antes, pero cuando se dan cuenta de lo que ha ocurrido, cae arrodillado. Pide distancia de Jesús, como era costumbre religiosa en la época. En lugar de acercarse, pone de manifiesto todo lo que les separa, quién es. Igual que Jesús se ha revelado a sí mismo y a Dios en Él, del mismo modo Pedro se da a conocer tal y como se conoce. No se oculta. Pero Dios ve el corazón.
- Pescadores de hombres, una inversión potente. Más que una metáfora. Pasar de la muerte a la vida, reunir en la barca, poner a salvo. Los que rescatan en nuestros días del mar se dice que "salvan". Esta soteriología destaca por contar con la humanidad en la salvación de la humanidad. Dios cuenta con la persona, en la historia se puede participar de su Historia y voluntad. Un misterio. No es Jesús solo, sino la comunidad la que atrae hacia sí.
- GÓMEZ ACEBO, Isabel, Lucas, EVD. Existen muchos textos sobre los evangelios, desde múltiples perspectivas y para diferentes públicos. Recomiendo este para comenzar con un mínimo rigor exegético, para adentrarse en su lenguaje, cultura, momento, pero de una forma actual y en diálogo con nuestro tiempo. Hay muchos buenos, insisto. Yo tampoco soy un experto. Solo un lector interesado.
- Ya falta tiempo. Esta es mi nota más importante.
- Fundamental, la capacidad para abrir posibilidades. Creo que una buena educación trata de eso. La limitación y el encarrilamiento continuo de personas en una dirección es una forma muy sutil de condenar la humanidad a la mansedumbre, al sometimiento, a formar parte de una masa.
- En la foto me daba el sol de cara. Creo que es evidente. Es como el camino que llevo recorrido, salvo por una cuestión importante: ¿Raíles, dónde hay en la vida?
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