La templanza y el apocalipsis

¿A qué viene esto en vacaciones? ¡Déjame en paz, intensito!
¿Otra vez a pensar? ¡Venga ya!
¿Por qué? ¡No quiero problemas!
¿Es un problema pensar? ¡Alégrate y disfruta! 

No sé si os suena de algo lo anterior. Hay personas que toman muy a pecho su vida y sus tiempos. A mí los que me cabrean son los que están todo el día creando problemas a los demás. Como los políticos, por ejemplo. (Los hijos y la familia no entran dentro de esta discusión, por supuesto.)

Vayamos al lío, que hoy me toca ser Sabio de Oriente y visitar a los niños. Ayer fui paje entre la locura de las tiendas. Lo que más me costó este año no fue pagar, que siempre me resisto un poco, sino mantener la distancia preventiva-saludable con los que iban a su bola. Llega un momento en el que la triangulación es im-po-si-ble. Estuve a punto de toser y estornudar a lo salvaje un par de veces, por si servía de disuasión. (Hay unos videos latinos en YouTube de una "Campaña sobre el uso del tapabocas" muy interesantes.)

La ironía socrática sirve para dejar al descubierto contradicciones. Si se usa para decir "verdades" (presuntas siempre) a la cara del otro, es ya sarcasmo o escupitajo. Y deja de tener gracia. ¡Pienso! 

Con 8 años menos y pañuelito al cuello. Ahora ya ni pienso en aquello. Hoy muestro mi dominio de la diagonal en las imágenes. 

La templanza es ambigua. Como virtud es acción en forma de término medio prudente. Ni calentón, ni helado. Entre los extremos. Admiro a esas personas que saben calmar y acercar a los que tienden a la exageración contumaz. Porque los extremos se van aproximando hasta tocarse violentamente entre ellos. Creo que hay ganas de resolver conflictos continuamente a la tremenda. Esa pasión del ser humano es usada hoy políticamente para cegar, haciendo creer a las personas que sufren que son unos iluminados y que todo es fácil. 

Sin embargo, en el Apocalipsis se condena. Y quien solo lee la Biblia a versículos sueltos tiene muy difícil entender a Dios. Una cita no es "la revelación". Más aún cuando se sacan de aquí y de allá solo los que interesan para justificarse a uno mismo. Esto no es solo para creyentes, también para no creyentes. 

LECTURAS

• KUTSCHER, Martin L., Niños conectados. Cómo conseguir equilibrar el tiempo que pasan ante la pantalla y por qué esto es importante, MENSAJERO 2018. Cualquiera que me conozca podría decir: "Médico, cúrate a ti mismo." Aún así, añado: me pareció interesante este libro porque trata de equilibrar, no de cortar. Fiel a la pedagogía y espiritualidad ignaciana, que es muy sana, se trata de poner orden en la vida, sin despreciar la bondad de la realidad y sus posibilidades. ¡Es también interesante para adultos descontrolados!
• KIERKEGAARD, Soren, La rotación de los cultivos. Ensayo para una doctrina de prudencia social, TROTTA 2006. (Está dentro de "Escritos 2/1"). Comienza citando la comedia "Pluto" de Aristófanes: "De todo llega uno a hartarse. Del amor... del pan..." Trata profusamente sobre el aburrimiento, el tedio, la apatía. Hay un momento en el que distingue a los que aburren a otros de los que se aburren a sí mismos. Luego aclara que la ociosidad sin aburrimiento es semejante a la vida más elevada. Frente al trabajo, la buena holganza. "El tedio es el panteísmo demoníaco" y aquí me quedo. Si alguien quiere charlar sobre el tema... ¡a los comentarios!
• BRENTANO, Franz, ¡Abajo los prejuicios!, EDICIONES ENCUENTRO 2018. Traducción de Zubiri para la Revista de Occidente y revisión del profesor García Norro. Un texto breve, pero exigente. Requiere de ciertos conocimientos filosóficos, de la situación poscartesiana del conocimiento y la ilusión de haber llegado a algo certero por vía de lo a priori. Este punto de la filosofía me resulta muy interesante, como una auténtica posibilidad para llegar "a las cosas mismas" previa liberación de uno mismo. Es un planteamiento muy respetuoso. 
• BRAGUE TUÑÓN, José, El equilibrio interior. Placer y deseo a la luz de la templanza, RIALP 2016. Tiene algo verdaderamente interesante, al menos para mí. Más allá de lo contracultural que sea, frente al relativismo y el nihilismo. Que ya sería suficiente. Afronta lo humano en su dimensión sexual. De tanto "ver" hemos dejado de "hablar". Sigue siendo tabú la madurez y no lo estridente.
• BYUNG-CHUL HAN, Muerte y alteridad, HERDER 2012. Un filósofo de moda en nuestro continente venido del extremo asiático. Actualmente profesor en Friburgo y muy conferenciante. Escritor prolífico de obras concentradas y de fácil acceso para un gran público. Trata temas de máxima actualidad. Curiosamente, también sobre la muerte. Creo que este año se merece una buena repensada. 
• SCHREIBER, Stefan, Navidad y política, SIGUEME 2018. Francamente, muy bueno y sorprendente. Quizá, con sus pocas páginas incluso, está destinado más a estudiosos y muy interesados, que a grandes públicos. Gracias a las editoriales que hacen este notable esfuerzo. 

NOTAS

• Me he comprado esta mañana un libro del Premio Nobel de Literatura 1908 por 2,5€. Increíble. Hoy sería su cumpleaños. Por eso he dado con él. En español, si hay algo, no está disponible en catálogos generales. Nada de nada. Fue un filósofo que puso alma y religión en el centro de todo lo demás. Quiero seguirle el rastro. (Mis padres tienen en casa una colección que tengo que revisar.)
• He estado contemplando y leyendo algo sobre la obra del pintor J. M. W. Turner. Hay personas con miradas penetrantes, que fijan la belleza y las posibilidades del instante para siempre. Y algunos, escasísimos, además lo saben contar. Creo que Turner sería una buena metáfora del maestro acompañante. Así como Kant sabía describir lo que ni había pisado. Solo algunos, muy dotados, no requieren de empatía, ni de experiencia. La mayoría solo anda volcando su vida sobre los demás sin ningún tipo de pudor. 
• Preparar un esquema equilibrado de algo no es tan sencillo. Los que manejan "visual thinking" y cosas así tienen todo mi respeto. 
• Estoy escribiendo frases cortas con mucho esfuerzo. Tengo la sensación de castrar matices y callar la boca antes de tiempo. Se me cuela alguna, sin querer. No reviso. De momento va ágilmente.  
• Odio disfrazarme y hoy me toca. Es un trauma infantil. Con menos de 5 años me llevaron en carnaval vestido de arlequín. Desde casa, en el autobús regular, paseado por las calles, todo un día con mis compañeros. No tenía ni idea de qué era un arlequín y yo iba vestido así. Con rombos y gorrito. Qué horror. 
• Desajustar horarios es muy fácil. Reajustarlos y poner orden, no tanto. De momento, controlo el espacio a mi alrededor. El flujo de la vida es otra cosa. Aunque no tengo la sensación de estar perdiéndolo en absoluto. Me deja sensación de paz y tranquilidad. 
• Sigo buscando una buena historia de la música, para salir de jaleo de Wikipedia. Aunque admiro esta posibilidad. ¿Os acordáis de aquellas enciclopedias de tomos y tomos? Yo tenía que levantarme una y otra vez por un este o aquel libro para consultar detallitos. Estudiar no era tan sedentario como ahora, también es verdad.